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PEMEX La Soberanía Pérdida

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PEMEX La Soberanía Pérdida

PEMEX La Soberanía Pérdida

PEMEX La Soberanía Pérdida. Irónicamente ha ido de la Privatización a la Nacionalización y luego de la Nacionalización a la Privatización.
PEMEX La Soberanía Pérdida

PEMEX La Soberanía Pérdida. De la Privatización a la Nacionalización. De la Nacionalización a la Privatización.

La creación de Pemex fue el resultado de la lucha de obreros y líderes políticos que buscaban recuperar los yacimientos privatizados. Irónicamente, la destrucción de Pemex se ha debido a otros líderes políticos y obreros que a través de los años la han ido desmantelando y saqueando.

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Al consumarse la independencia, los derechos de propiedad sobre el subsuelo pasaron a manos del gobierno mexicano. Durante el imperio de Maximiliano de Habsburgo, se entregaron las primeras concesiones a particulares.

Coincidencia o no, así como con el Neoliberalismo se reinició la concesión del petróleo a particulares y posteriormente en 2013 se dio la reforma energética. El presidente Porfirio Díaz promulgó el Código de Minas de los Estados Unidos Mexicanos en 1884 y en 1901, la Ley del Petróleo, dando origen a los permisos a empresas privadas para explotar los yacimientos de la nación.

Terminado el porfiriato, el gobierno mexicano trato de recuperar los derechos sobre el petróleo, siendo hasta el gobierno de Venustiano Carranza, cuando finalmente se logró cobrar impuestos a los extranjeros por la explotación del petróleo. Asimismo, Carranza estableció en el Artículo 27 de la Constitución que los bienes del subsuelo son patrimonio de la nación.

A finales de 1934 el presidente Abelardo Rodríguez fundó Petróleos de México S.A. (Petromex), la primera empresa estatal creada para explotar los yacimientos nacionales. Finalmente, la explotación en manos de empresas privadas y extranjeras terminó con la expropiación petrolera llevada a cabo por el general Lázaro Cárdenas el 18 de marzo de 1938. Los trabajadores agremiados al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, quienes demandaban un contrato colectivo y prestaciones, apoyaron la decisión del presidente.

Con el acto de expropiación se tomó posesión de los bienes de las distintas compañías petroleras que operaban en México. Como está sucediendo en la actualidad con el presidente López Obrador, en aquel entonces, la medida tuvo un fuerte apoyo popular, teniéndose un mitin que reunió más de 100 mil personas el 23 de marzo 1938. Además, la población hizo grandes donaciones para pagar la indemnización a las empresas extranjeras.

No obstante, Estados Unidos e Inglaterra respondieron con un boicot económico y mediático contra México, el 7 de junio de 1938 se creó Petróleos Mexicanos para ser, junto con la Comisión Federal de Electricidad, el origen del llamado “Milagro Mexicano”. Un periodo de crecimiento y bonanza de la economía mexicana que duro más de 30 años.

Sin embargo, a través de los años la corrupción se apoderó de Petróleos Mexicanos. PEMEX se volvió la caja chica de los presidentes, el tráfico de influencias para el otorgamiento de contratos a cambio de jugosas propinas, y las ganancias que eran repartidas entre los gobernadores a cambio de favores políticos entre el PRI, PAN y PRIAN.

Desde Carlos Salinas de Gortari, pasando por Ernesto Cedillo, después los panistas Vicente Fox y Felipe Calderón, y con Peña Nieto dándole la puntilla. El proyecto Neoliberal, que también se define como capitalismo puro, llevaron a la empresa que le ha dado los mejores años a México, a su peor escenario económico de su existencia.

La decadencia anunciada y a propósito provocada por los neoliberales, al igual que Porfirio Diaz, para entregar a empresas privadas la explotación de los yacimientos de la nación.

Conociendo la historia de México, sin ser un genio, lo que busca el presidente Andrés Manuel López Obrador es repetir la historia, pero a favor de México, busca un segundo “Milagro Mexicano” teniendo a Pemex nuevamente como pilar e impulsor de la economía mexicana.

No es nada extraordinario, es solo poner las cosas en su lugar para beneficio de la Nación.